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"Este
estudio aporta una visión general sobre la distribución del lobo en La Rioja
desde el siglo XIX, cuando llegaba al Valle del Ebro, hasta la actualidad,
aportándose datos a partir de 1987 sobre observaciones, capturas, rastros y
huellas en los Altos Valles del Najerilla e Iregua. El lobo casi desapareció
del territorio riojano durante la década de los 60. Entonces la emigración a
las ciudades y los cambios en el mundo rural fueron drásticos. La distribución
actual podría obedecer a un proceso de dispersión natural desde los
núcleos cercanos a la provincia de Burgos. Según nuestros datos, ha estado de
manera intermitente en las Sierras de la Demanda, Urbión, Las Hormazas y
Cebollera. Otros autores lo han detectado en los valles del Leza, Jubera y
Cidacos. Se ha encontrado al menos un grupo familiar actualmente desaparecido.
Entre 1987 y 2002 se controlaron 398 batidas de caza mayor en el Najerilla;
sólo en 8 se mataron 12 lobos, 2 fueron hallados muertos sin poder determinar
las causas y dos más fueron capturados en el Iregua. Los ganaderos introdujeron
perros mastines para evitar los ataques; sin embargo, algunos perros han sido
acostumbrados a alimentarse de carne de cordero, provocando que ellos mismos
puedan atacar a ovejas y que compitan con pos buitres por las carroñas. Los
perros han incrementado, de manera significativa, el porcentaje medio de las
que se alimentan del 0% en años anteriores a 1987 al 18,6% en 1997. Esta
competencia no ha supuesto ningún problema en la población de aves carroñeras pero
favorece la confusión de los ataques de perros con los de lobos."
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